La caravana es una manera de disfrutar vacaciones llevando la casa a cuesta
María Alejandra Martínez J
Cuando nos sentamos a planear las vacaciones siempre buscamos las mejores opciones de disfrute en cuanto a relación calidad-precio.
También tomamos en cuenta que ese descanso sea igual de válido para todos los integrantes de la familia, a fin de que puedan disfrutarlas y recordarlas como especiales.
Una buena opción para viajar en familia resulta hacerlo en caravana, pues es una manera de disfrutar de las vacaciones llevando “la casa a cuestas”.
Además esta modalidad de vacacionar en motorhome supone un importante ahorro frente a viajar y hospedarse en hoteles, puesto que puedes hacer la comida en el autocaravana y eso permite tener un presupuesto más holgado para el disfrute de nuestros días de descanso.
¿Qué hacer?
Lo primero que deberíamos hacer sería diseñar la ruta que queremos recorrer en la caravana y señalar los sitios de interés que pudiéramos conocer durante las visitas.
Igualmente, se deben seleccionar las áreas de campings que hay en cada zona de nuestro recorrido y los servicios que ofrecen los aparcaderos.
Los campings no suelen aceptar reservas previas, así que se debe intentar llegar en la mañana para poder tener asegurada la parcela donde se pernoctará. Luego, con más tranquilidad, podemos continuar con nuestra visita programada para ese día.
Normalmente se debe pagar una tarifa por cada persona que viaja y por la caravana. Los campings suelen estar dotados de una cantidad de servicios como: aseos; duchas; fregadero; áreas para hacer parrilla; piscinas; área de juegos infantiles; mesas de juego como pin pong; canchas multiusos; bares/restaurantes y actividades programadas para toda la familia.
También tienen pequeñas tiendas dentro de sus instalaciones para abastecerse, pero en ocasiones pueden resultar ser algo costosas. Así que podemos traer con nosotros la compra de víveres que requerimos para pasar esos días o buscar los supermercados, que puede haber en las zonas que vamos a visitar, y comprar directamente allí.
Es importante tener presente que muchas veces en las ciudades no dejan circular con las autocaravanas. Por ello, habilitan estacionamientos en las “afueras” del casco urbano para que podamos dejar allí el motorhome y así continuar el recorrido a pie o en transporte público.
Una aventura familiar
Para los niños, viajar en una caravana supone toda una aventura, es un plan que deberíamos intentar hacer en familia al menos alguna vez.
Esta modalidad nos brinda la libertad de desplazarnos y elegir nuestro recorrido de forma autónoma y con total libertad. Algo que tiene mucho valor, más en estos tiempos en los cuales vivimos una delicada situación sanitaria mundial por el Covid-19.
Quizás como desventaja podría resultar que, aunque por lo general los campings cuentan con instalaciones de alta calidad, en ocasiones encontremos algunos con servicios más básicos y que no satisfagan por completo nuestras expectativas de diversión y confort.
También puede ocurrir que al pasar tantos días de vacaciones “nómadas”, nos acabe por resultar agotador y más a los niños.
Pero como todo en la vida, en su justa medida, seguro que unas vacaciones en caravana nos aportarán una experiencia para recordar siempre dentro de la bitácora de nuestras vidas.