La toxina botulínica puede ser aplicada en jóvenes
Se puede pensar que la toxina botulínica, cuya presentación comercial más conocida es el Botox, sólo sirve para personas con más de 35 años de edad; quienes lo usan para atenuar las líneas de expresión.
Sin embargo, la aplicación de la toxina botulínica tipo A no está contraindicada en jóvenes, incluso en adolescentes, pues se usa para atenuar cicatrices y otro tipo de marcas formadas por las contracciones musculares (como el fruncir el entrecejo o sonreír exageradamente), así como algunos daños en la piel ocasionados por la inadecuada exposición al sol, líneas de expresión prematuras o porque tienen una gesticulación pronunciada.
Todas esas imperfecciones mejoran con el Botox Cosmetic, o cualquier otro de uso comercial como Dysport o Xeomin, por citar algunos ejemplos. Así que el temor de mujeres y hombres menores de 30 años de edad debe disminuir al conocer un poco más sobre el tema.
Aunque sorprenda, la aplicación de toxina botulínica también puede hacerse en niños, luego de los dos años de edad. “Esto se hace para mejorar patologías como la parálisis facial. En ese caso se justifica la necesidad de aliviar o contribuir a su recuperación. Y existe la otra visión de usarlo en beneficio de evitar las líneas de expresión que se forman por la expresividad. Ese deseo de lucir bien viene dado por la motivación de la chica que busca ayuda a temprana edad para prevenir futuros problemas”, aduce el médico esteticista Alejandro González en una entrevista dada al Diario Panorama.
Buscar a especialistas
A pesar de lo recomendado en jóvenes, recuerden que siempre lo correcto es acudir a una consulta previa con un médico y no usar estéticas donde trabajen personas que no son profesionales de la salud debidamente calificados.
Sin duda alguna, aplicar la toxina botulínica tipo A en jóvenes no es perjudicial. El problema se crea cuando la dosis no es la indicada o la frecuencia excede lo que el paciente joven realmente necesita.
“Aplicarlo en jóvenes no es perjudicial, pero tampoco es lo más idóneo, porque, a medida que se apliquen dosis a temprana edad, éstas tendrán que ser más elevadas a lo largo del tiempo y eso provoca una resistencia a la sustancia, lo que es perjudicial para la piel”, mencionó el cirujano plástico César Olivero en una entrevista al Diario Panorama.
Recuerde que sólo el médico especialista en medicina estética, o un dermatólogo, pueden saber cuántas sesiones requiere una persona, así como la cantidad correcta y los puntos del rostro que serán tratados.
“El botox es un producto médico y debe ser suministrado por doctores que estén al tanto de cómo se administra, en qué áreas y cuáles son las dosis. De lo contrario, los efectos son irreversibles”, advirtió González.