Padres divorciados, hijos de fin de semana
Marlene Rizk / Yelitza Izalla Yánez
Los acuerdos entre padres divorciados dejan huellas en la vida de los hijos, porque la separación legal puede ocasionar cambios conductuales, emocionales o físicos en niños y adolescentes.
El pediatra y psicólogo Juan Nascimento Thomas dice que es necesario buscar orientación en cuanto a la disciplina y manejo de los afectos, “de manera que los niños no estén en medio de este campo de batalla y guerra de manipulaciones cuando se produce la separación de sus padres”.
Una de las consecuencias es no llevar un acuerdo armonioso, que incluya una sola línea de crianza y costumbres. Por lo general, los niños van de una casa a otra sin sentir a una como verdadera y deben compartir los fines de semana hasta con cuatro familias diferentes (incluyendo a los abuelos) cuando en esas casas se mantienen distintas rutinas.
Ni hablar de las vacaciones, los festivos de diciembre y cuando los acuerdos de custodia compartida incluyen vivir una semana con papá y otra con mamá, lo cual cambia desde las comidas hasta las rutinas para asistir al colegio, actividades extracurriculares y paseos.
Lo común
El verdadero daño del divorcio se da cuando los padres no llevan sanamente la nueva situación Foto: Pixabay
“Este fin de semana le toca con su papá y el otro se queda conmigo’’; “ellos tienen dos casas”; “Cuando llega de estar con su padre o sus abuelos paternos viene todo malcriado, porque le dan todo lo que pide y hace lo que le da la gana’’; “no hay control con los videojuegos y viene muy alterado”; “Me enteré que la familia de él dice que yo no lo he sabido educar ‘’, estas y muchas otras frases negativas se escuchan decir frecuentemente entre las parejas que se han separado o divorciado.
En estos casos lo mejor es llegar a acuerdos que afecten lo menos posibles a los niños, que son quienes al final quedan en el medio de ambas familias. Es por ello, que el psicólogo recomienda que los maestros conozcan sobre este contexto, con la finalidad de que puedan apoyar emocionalmente al niño, niña o adolescente.
El clima familiar es importante y es necesario llevarlo en términos amistosos y de resolución de conflictos, “debido a que 75% de las personas que se divorcian se vuelven a casar y 66% de las parejas de segunda unión con hijos de su primer matrimonio también se separan”.
Qué hacer
El divorcio impacta más en los niños si los padres no llegan a acuerdos Foto: Pixabay
Hay ciertos comportamientos o normas que los padres pueden adoptar para evitar afectar emocionalmente a sus hijos, como el hablar mal uno del otro, de sus familias, o cambiar radicalmente las normas que fije el otro porque al final llenan al niño de resentimiento, confusión y los ponen en una situación incómoda en la cual deben elegir entre personas que aman.
“No es bueno hablar mal de la expareja, si bien pasaron situaciones complicadas como infidelidades y otros conflictos de gravedad, no se debe externar ese rencor, si es que existe, hacia los hijos, pues para el niño sigue siendo su madre o padre. Por tanto, si se necesita desahogo es recomendable buscar a un amigo, o a un profesional en psicología que pueda escuchar”, cita la página web psicologosdemexico.com.
Estos son algunos de esos consejos:
*Para evitar los conflictos y el estrés, es necesario respetar los regímenes de visita y custodia
*Evitar dejar a los niños embarcados el fin de semana que le corresponde quedarse con ellos
*No involucrarlos en los problemas de los adultos, ni hablar mal uno del otro
*No desacreditar, contradecir o reprochar a su expareja durante los días que permanezcan juntos
*Los niños y más los adolescentes deben sentirse como “en su casa’’ y para ello se recomienda que tengan en ambos hogares juegos, ropa, libros, cepillos de dientes y ropa
*En ambas casas deben mantenerse la mayoría de las rutinas, como por ejemplo la del sueño y las comidas
*No involucra a los hijos en los acuerdos económicos
Las cifras
La adaptación y las reacciones tras el divorcio dependen de la manera de llevar el proceso Foto: Flick
En Venezuela estas situaciones son muy comunes. Según el último censo del Instituto Nacional de Estadística (INE) se registran un promedio de 25 mil divorcios al año, lo que significa que los padres deben compartirse las responsabilidades.
Estadísticas comparativas sobre la cantidad de divorcios en el mundo indican que este país tiene 27% de las separaciones, según un estudio publicado en la revista online estadounidense Business Insider.
Chile y Uruguay son las naciones donde menos se reportan divorcios, pues estos apenas alcanzan 3%, seguida de Vietnam con 4% y Libia con 5%.
En cambio Europa es el continente más divorciado del planeta, “con Bélgica liderando los índices con 71%, mientras que España se sitúa entre los cinco primeros países con 61%. También lideran en el mundo Rusia con 51% y Francia con 55%”, cita el informe.
En América Latina el único país que entra en el top 10 de divorcios es Cuba, con 56% y Estados Unidos con 55%. Este continente sigue presentando cifras bajas y las cifras más resaltantes las tienen Costa Rica (47%), Venezuela y Panamá (27%) y Brasil (21%).
Los creadores del estudio advierten que la baja puede deberse a que hay escasa información sobre las estadísticas de divorcios y custodias compartidas. De hecho, advierten tener pocas cifras de Argentina, Bolivia y Paraguay.
Otros que están en la lista son Ecuador donde el porcentaje de divorcios llega a 20%; México con 15%; Colombia con 9% y Guatemala con 5%.
