Montessori y sus principios para una crianza amorosa
Escuchar a cada niño, comprenderlo y respetar su ritmo forman parte de una crianza más humanizada, que educa a personas sensibles ante la vida y los hace adultos más felices.
La educadora italiana María Montessori, quien fue criticada por lanzar su teoría de una educación libre cuando predominaba la crianza basada en la imposición, dejó un legado que hoy en día cobra fuerza.
El sistema de Montessori fue dado a conocer a finales del siglo XIX y principios del XX. La nueva pedagogía en el aula consistía en respetar los tiempos y las emociones de cada niño.
Esa teoría hoy en día toma fuerza y da impulso a los padres que desean romper esquemas, en especial aquellos de crianza impositiva.
A continuación 12 de los principios de la educadora:
1) Recuerda siempre que los niños aprenden de lo que les rodea. Sé su mejor modelo.
2) Si el niño vive en una atmósfera donde se siente cuidado, integrado, amado y necesario, aprenderá a encontrar amor en el mundo.
3) Ayuda a que tu hijo crezca sintiéndose seguro a cada instante, será entonces cuando aprenda a confiar en los demás.
4) Propicia que tu hijo vea que sus ideas y opiniones son siempre aceptadas, con ello conseguimos que se sientan bien ellos mismos.
5) Si criticas mucho a tu hijo, lo primero que aprenderá es a juzgar. En cambio, si lo elogias con regularidad, él aprenderá a valorar.
6) Concéntrate en que tu hijo está creciendo y desarrollándose de modo óptimo, valora siempre lo de lo bueno del niño de tal manera que no quede nunca lugar para lo malo.
7) Escucha siempre a tu hijo y respóndele cuando él se acerque a ti con una pregunta o un comentario.
8) ¿Qué ocurre si le muestras hostilidad al niño? él aprenderá a pelear y si se ridiculiza al niño de modo habitual, será una persona tímida.
9) Si desprecias a tu hijo niño con frecuencia, se desarrollará un sentimiento muy negativo de culpa él. No hables mal de tu niño/a, ni cuando está cerca, ni cuando no lo está.
10) Respeta a tu hijo aunque haya cometido un error. Apóyalo. Lo corregirá ahora o quizá un poco más adelante.
11) Debes estar dispuesto a ayudar a tu niño si busca algo, pero también tienes que estar preparado para permitir que encuentre las cosas por sí solo.
12) Cuando te dirijas a tu hijo, hazlo siempre de la mejor manera. Ofrécele lo mejor que hay en ti mismo.
María Montessori
Con información de lamenteesmaravillosa.com y Fundación argentina María Montessori